Arquitectura y público profano (II)

Pisos de protección oficial, Carabanchel, Madrid. Arq: Foreign office architects.

Televisión española, nos "deleitó" el miércoles con un especial de "Comando Actualidad", en el que daban a conocer algunas de las viviendas más renombradas a nivel arquitectónico de Madrid y aquellos que las habitaban. Y como no podía ser de otra forma, en nuestro pequeño mundo se ha abierto un debate acerca de él.

Indignación, podría ser la palabra que resumiese las opiniones que he ido cosechando entre los compañeros. Cierto es que en muchas ocasiones nuestro punto de vista no coincide con el del público profano y que cometemos errores de bulto que después han de sufrir los habitantes, pero no era el caso de los edificios que se han mostrado. En especial me parece preocupante la actitud de la reportera, quien de forma descarada, buscaba e insistía en encontrar problemas, defectos y vecinos indignados.

En el primer edificio, tan solo pudo encontrar la pega del color naranja de la fachada que ciertamente no parece acertado, pero por el contrario, tanto distribución, como acabados, eran de gran calidad pese ha costar tres veces menos que el mismo piso de promoción libre. En el de FOA (en la imagen), parece extraña la actitud de un vecino que se queja de formar parte de un experimento bio-climático, pues es su casa, su santuario y algo que se debería respetar. Pero inmediatamente comenta que en verano se está muy fresquito y que funciona muy bien. Todo invento tiene una primea vez. Son solo dos ejemplos de todos los comentario, que sobre todo en la primera mitad del reportaje, podemos escuchar.

Es sorprendente como la gente prefiere los bloques insulsos e insustanciales en lo arquitectónico, de ladrillo cara-vista si es posible, de las promociones libres, aun cuando estos muchas veces son de peor calidad, especialmente en su distribución.

Comentario al margen, es la manía de la empresa municipal de la vivienda de Madrid, que se obstina en vallar todas estas promociones, haciéndolas herméticas e insolidarias en lo urbano, aun cuando los arquitectos buscan lo contrario.