"NEMO PROPHETA IN PATRIA": nadie es profeta en su tierra. Nombre del barco de Alvar Aalto en Muraatsalo (Finlandia)."Ingrata patria, ne ossa quiedem mea habes": ingrata patria, ni siquiera tienes mis huesos. Epitafio de Publio Cornelio Escipion "El Africano".
Cuadro del submarino Isaac Peral.
Son muchos los personajes que no se vieron reconocidos en su país durante su vida, o gran parte de esta. Desde el Escipion que logró vencer a Anibal en la segunda guerra púnica, pasando por el mismísimo Colón, o el gran inventor español Isaac Peral... Tantos talentos incomprendidos, tantas patrias ingratas, tantas ideologías extremistas que han obligado al exilio a aquellos que realmente enriquecen la cultura de una nación.
Este es mi pequeño homenaje a todos aquellos que se vieron excluidos, incomprendidos o exiliados de su nación, pero que han aportado enormes beneficios a la humanidad pese a ello.
Miremos a nuestro alrededor, para que ningún talento quede sin su justo reconocimiento. Bebés medicamento en Sevilla, transplantes propios del doctor Frankenstein en Valencia y curas personalizadas en el CIMA, son alguno de los ejemplos a seguir en nuestro país. ¿Pero cuantos otros han de buscar en el extranjero el reconocimiento?.
Eulalia Valldosera, actualmente en el Museo Reina Sofía.
"Se sintió apátrida muchos años. Huyó de España a principios de los 90 porque pensó que era la única forma de crecer como artista. Esta refugiada, nacida en Villafranca del Penedés en 1964, pidió asilo artístico en Holanda, donde comenzó a desarrollar una de las carreras más personales y sólidas de su generación. Un día decidió regresar para hablar desde su orilla del Mediterráneo. Ahora se siente por fin una artista española que expone en España". Extracto de ABC.es
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