miércoles, 10 de junio de 2009

Energía nuclear

Es de plena actualidad el debate a favor y en contra de la energía nuclear. Hay quienes la detestan por el riesgo que ven en la repetición de un Chernobyl y otros muchos alegando lo peligroso de sus residuos y la larga vida contaminante de estos. Pero en la actualidad a resurgido su popularidad por sus nulas emisiones de CO2, por lo que podría surgir como una solución al cambio climático. Entre quienes la apoyan, el ex vicepresidente estadounidense Al Gore.

En mi opinión, no solo no se deberían garantizar la vida útil prolongada de estas centrales, sino que se tendría que acometer la construcción de nuevas. Es arto sabido por el mundo especializado, que las medidas de seguridad de las que hoy disponemos, son suficientemente fiables como para no correr riesgos, es más, esto ha calado de tal forma en la población de las localidades en las que se instalan, que es extraño encontrar quienes las quieran cerrar, que muy al contrario, agradecen la riqueza creada en zonas deprimidas del país y poco habitadas. La posibilidad de disponer de energía barata sin emitir gases de infecto invernadero a la atmósfera, debería ser suficiente motivación para su promoción.

Por el contrario, nuestro gobierno se obstina en cerrar esta puerta una y otra vez, prefiriendo la construcción de grandes redes eléctricas que importen la energía nuclear francesa vía Pirineos. Hipocresía del más alto grado. Ya somos un país suficientemente dependiente de hidrocarburos y gas natural, no lo seamos también de aquella energía de la que podemos surtirnos nosotros mismos. En vez de suprimir las nucleares, yo propondría la supresión de las térmicas, las cuales si causan efecto invernadero al ser las instalaciones industriales más contaminantes, que a su vez, nos permitiría no depender tanto de países como Argelia que nos niegan gaseoductos y obras a nuestras constructoras. Al mismo tiempo, que se está llevando a cabo el desmantelamiento del sector minero asturiano.

Como problemáticas mayores, están la aceptación social en los lugares en donde se quieran instalar. En el recuerdo quedan casos como Lemóniz, o la fatídica muerte de una manifestante anti-nuclear en Tudela. Por ello, sería conveniente la ampliación de aquellas plantas capaces de serlo y construir nuevas únicamente bajo referéndum vecinal. Y tan bien la producción de residuos, los cuales pese a estar controlados en cementerios nucleares, no deja de ser un parche al problema. Por suerte recientes estudios en EEUU, parecen ir muy encaminados en la depuración de estos, o la reinserción en el proceso nuclear.

Si el gobierno quiere evitar pequeños sustos como el de Ascó, será mejor que garantice la continuidad de estas plantas, para que con el futuro asegurado, acometan las reformas necesarias para la fiabilidad de las mismas.


3 comentarios:

  1. El tema de la nuclear es complicado porque si que es cierto que genera ingentes cantidades de energia sin producir gases contaminantes, pero que hay de los residuos?
    Estan los de media radiactividad los cuales son llevados a cementerios y almacenados bajo toneladas de hormigón, pero los residuos de alta radiactividad son almacenados en las propias centrales (de manera ilegal) sin encontrar una solución para ellos. Estamos hablando de residuos que tienen una vida radiactiva de 10000 años o más. Quien sabe lo que puede ocurrir? como se asegura la seguridad de dichos residuos? Estamos hablando de periodos de tiempo muy extensos para el ser humano. Estoy seguro que el hormigon que recubre los barriles radiactivos no tiene tanta vida útil.
    Hasta el momento lo unico que se hace es esconderlos bajo la alfombra y continuar utilizando esta energía maravillosa.
    Es cierto que para el momento en el que vivimos es una solución ideal frente al agotamiento del petroleo, pero que pasara con las generaciones futuras?? Además el uranio es una energia tan agotable como el carbón o el petróleo.
    No seria mejor buscar una solución definitiva a la demanda energética?Existe de hecho energía nuclear de fusión que no genera residuos radiactivos (en experimentación) y todas las conocidas energias renovables que no resultan muy rentables. De todas formas el nivel actual de consumo energético podría reducirse mucho sin reducir sustancialmente nuestro nivel de vida.
    En fin supongo que el ser humano es así, solo mira por el momento que vive, y no por lo que pasará dentro de 200 años, al fin y al cabo no es problema nuestro.

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  2. Lo cierto, es que los estudios llevados a cabo con relación a los residuos nucleares, esperan poder ser efectivos a partir de de apenas 10 o 15 años, mientras que la fusión nuclear, aun siendo muy esperanzadora, no estará disponible hasta mediados del presente siglo. Mientras esperamos estos avances científicos, la gestión de los residuos es completamente segura y se garantiza la salubridad pública.

    Aunque las posturas en relación a este tema, reconozco se mantienen muy alejadas y ambas mantienen hechos objetivos en favor de su argumentación.

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  3. si que es cierto que la seguridad y la salubridad publica esta garantizada, pero exinten estudios realizados a la poblacion de los alrededores de las centrales y resulta que existe un mayor numero de tumores y problemas cancerigenos.es cierto que nadie se va a morir pero de alguna manera se esta vendiendo la salud a cambio de energia barata y al fin y al cabo dinero.tambien es cierto que los propios habitantes de las zonas afectadas estan muy contentos con sus centrales ya que no pagan luz y tienen muchos puestos de trabajo muy bien pagados.
    Al final el dinero lo compra todo, o casi todo (espero que exista algo que no).

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